No es extraño preguntarse si comiendo determinados alimentos favorecemos o no nuestra fertilidad, y por tanto buscar un patrón dietético que sea útil para mejorar las posibilidades de quedar embarazada. ¿Existe? Sí, pero en general no difiere mucho de lo que podríamos llamar la dieta mediterránea saludable, aunque con un acento especial en determinados productos. Por otro lado, queda claro también que aquellos productos que no favorecen nuestra salud como hábitos cotidianos, disminuyen nuestra fertilidad.
El alcohol y el tabaco, que provocan bruscas deshidrataciones en el cuerpo, disminuyen la calidad tanto de los ovarios como del semen. El abuso del café o el té sube la tensión arterial, fuerza el sistema circulatorio y puede favorecer inflamaciones locales que impidan la fecundación. Las bebidas azucaradas, la pasta o el pan, pueden engordar con los consiguientes problemas sobre la salud y la fertilidad que la obesidad genera.
Pero centrándonos en los productos que nos ayudan a quedarnos embarazadas, a continuación se exponen diez grupos de alimentos ideales para la consecución de nuestro objetivo.
- Aceites de oliva y girasol aumentan la fertilidad: Los aceites vegetales en general, salvando el de coco, el de palma y algún otro, son aportes de ácidos grasos insaturados que ayudan a reducir el colesterol arterial y por tanto favorecen la circulación sanguínea y el control de las inflamaciones. También influyen en el estímulo de las glándulas sexuales, mejorando la ovulación y la acogida del óvulo fecundado. Además contienen flavonoides y otros polifenoles que actúan como antioxidantes, antiinflamatorios y cardiotónicos entre otras muchas virtudes; también ayudan al mantenimiento de la máxima capilarización de los órganos, permitiendo su correcta irrigación sanguínea, y protegen el hígado. Por otro lado, en especial el aceite de girasol supone un importante aporte de zinc, uno de los metales más importantes para la fertilidad tanto femenina como masculina.
- Pescados azules: Su aporte en ácidos grasos insaturados Omega-3 y Omega-6 es fundamental para la reducción del colesterol, por sus características antiinflamatorias, así como por la estimulación de las glándulas sexuales, que fabrican las hormonas encargadas de velar por la fecundación y acomodo del ovario fecundado. En especial se recomienda el salmón, sea en carne o en aceite, porque los pescados grasos de mar tienen a acumular mercurio y metales pesados de la contaminación.
- Carne de ave: Comprende un aporte en proteína pura muy importante para el mantenimiento del metabolismo óptimo y por tanto de un peso correcto, sin deficiencias de elementos que nos lleven a la anemia, enemiga importante de la fertilidad. Es preferible la carne roja porque aporta mucha menos grasa, aunque esta sea más rica en hierro. En general deberemos buscar el aporte de este elemento en otros alimentos.
- Lentejas: Las legumbres en general son muy importantes porque aportan fibra, que favorece la flora intestinal y la reducción de hidratos de carbono en sangre, y también por sus aportes en zinc, equiparables a los del aceite o las pipas de girasol. En el caso de las lentejas, se suma un considerable aporte de hierro.
- Ensaladas de hoja oscura: Las espinacas, la lechuga, las acelgas y otras plantas de hoja oscura que se utilizan para hacer ensaladas son muy importantes por que aportan además de fibras folatos, un precursor de la vitamina B que tan importante es en el ciclo del embarazo. Si la fecundación cuaja, nuestro cuerpo precisará de un nivel extra de folatos que no está claro que los suplementos nos garanticen. Mejor tomarlos de los alimentos naturales. Si las ensaladas se hacen mezclando cebolla, añadimos una mejora de la función circulatoria.
- Brócoli: Además de fibra y pectinas, que mejoran la función intestinal, el brócoli es una mina de elementos y propiedades benignas para la fertilidad: aporta vitamina A, vitamina C, B1, E, ácido fólico, calcio, potasio, magnesio, zinc, yodo y hierro. ¡Ahí es nada!
- Hígado y otras vísceras: El hígado de ternera destaca por su aporte múltiple, tanto proteico como en hierro, zinc o folatos. En general las vísceras aportan muchos elementos y vitaminas favorables a la fertilidad femenina
- Pimiento rojo y tomate: Son verduras excelentes por su aporte en fibra, agua, antioxidantes de origen vegetal y sobre todo su riqueza en vitamina C. También la fruta en general aporta estos elementos, siempre que evitemos tomarla en zumos, pero presenta el inconveniente de aportar excesivos azúcares.
- Plátanos y aguacates: Son aportes de energía mediante grasas vegetales ricas en antioxidantes y precursores de las vitaminas, como el ácido fólico, que estimulan algunas de las hormonas que regulan la fertilidad. Pueden comerse todos los días sin problemas. El plátano aporta potasio, importante para el tono muscular del cuerpo y por tanto para evitar calambres y lesiones que puedan poner en peligro un embarazo. El aguacate es uno de los alimentos más indicados
- Arroz integral: Para mantener la regularidad sin alteraciones del ciclo menstrual necesitaremos una fuente de hidratos de carbono estable que no nos cree picos de insulina en sangre por falta de azúcar. Nuestra fuente perfecta puede ser el arroz integral, más sano que la pasta y que también contiene la fibra de la cáscara, con vitaminas como los folatos.