Tanto el TAC (Tomografía Axial Computarizada) como la Resonancia Magnética (RM o RMN) son pruebas diagnósticas basadas en la imagen, pero son técnicas diferentes.
A continuación, te explicamos en qué se diferencian la Resonancia Magnética del TAC.
¿Qué es un TAC? ¿En qué consiste?
El TAC se realiza con un aparato llamado escáner. Durante esta prueba se somete al cuerpo a múltiples rayos liberados simultáneamente desde diferentes ángulos y luego un ordenador los ensambla para generar una imagen del área que se quiere estudiar. El TAC es más detallado que una radiografía, ya que en la radiografía corriente únicamente se emplea un haz de luz.
La radiación producida por el escáner hace que los tejidos menos densos o blandos sean más visibles que los tejidos sólidos (huesos). En medicina se llaman tejidos blandos todos aquellos que no están compuestos por huesos como los músculos, los ligamentos, los nervios, los vasos, los órganos, etc.
Debido a que el TAC es un procedimiento no invasivo que proporciona vistas transversales detalladas de todo tipo de tejidos, se está convirtiendo en el método ideal para diagnosticar muchas enfermedades intestinales como diverticulitis y apendicitis, y para visualizar el hígado, el bazo, el páncreas y los riñones. También es importante destacar el TAC Craneal para evaluar la cabeza (cerebro, cara, senos paranasales y cráneo).
Y la Resonancia Magnética, ¿en qué consiste?
Por otro lado, la Resonancia Magnética es una máquina que permite obtener una imagen de los tejidos blandos de un paciente mediante el empleo de un campo magnético. Se utilizan imanes y ondas de radio potentes para crear imágenes del cuerpo. La principal diferencia entre el TAC y la Resonancia Magnética, es que la segunda no usa rayos X. Otras diferencias son que el TAC es más rápido de realizar pero tiene menor resolución.
Debido a que la Resonancia Magnética puede dar imágenes tan claras de los tejidos blandos alrededor de los huesos, es el examen más adecuado para los problemas de la columna y las articulaciones. También se usa mucho para diagnosticar lesiones deportivas, especialmente en la rodilla, el hombro, la cadera, el codo y la muñeca. Las imágenes le permiten al médico ver hasta pequeñísimos desgarros y lesiones en los ligamentos y músculos.
Además, la Resonancia Magnética del corazón, la aorta, las arterias coronarias y los vasos sanguíneos es una herramienta no invasiva para diagnosticar enfermedades del sistema cardiaco. Los médicos pueden examinar el tamaño y el grosor de las cámaras del corazón y determinar el grado de daño causado por un ataque del corazón o por una enfermedad cardiaca progresiva.
Una prueba diagnóstica importante es la RMN Cerebral que toma imágenes por resonancia magnética de la cabeza para estudiar el cerebro y otras estructuras craneales.
El precio de la Resonancia Magnética puede variar según el número de zonas y el tipo de Resonancia Magnética puede oscilar entre los 150 euros y los 500 euros.
Con la Resonancia Magnética también se puede examinar detalladamente los órganos como los pulmones, hígado, riñones, bazo, páncreas y vasos sanguíneos abdominales, lo que permite diagnosticar y evaluar tumores y problemas en su funcionamiento. Es la herramienta de diagnóstico preferida para examinar el sistema reproductivo masculino y femenino, la pelvis, las caderas y la vejiga. Además, las resonancias magnéticas también sirven para controlar si existe alguna alteración en tus implantes en caso de que sospeches que estan rotos y se recomienda someterse a una Resonancia Magnética Mamaria.
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Antes de hacerme una Resonancia Magnética (RMN) y un TAC
Existe una preparación previa para poder hacerte un TAC o una Resonancia Magnética. Recuerda que para poder realizarte cualquiera de las dos pruebas diagnósticas necesitas SIEMPRE una prescripción médica porque si no ningún centro médico ni ningún especialista te hará la prueba que necesitas.
- Por lo general, tanto la RMN como el TAC requieren de un ayuno previo a la realización de la prueba. Suele ser de entre 4 a 6 horas – a concretar con el médico porque no siempre es estrictamente necesario.
- Los objetos de metal como joyería, audífonos, horquillas, gafas, etcétera están prohibidos.
- Si tienes prótesis removibles, has de quitártelas antes de realizar cualquier prueba diagnóstica e informar al médico en el caso de tener implantes cocleares, stents vasculares o marcapasos, entre otros. Recalcar: siempre informar al médico.
- En el caso de las Resonancias Magnéticas, existen dos tipos de RMN: las RMN abiertas y las RMN cerradas que son las más comunes. Si resulta que eres una persona que tenga claustrofobia o seas propensa a agobiarte en lugares cerrados, es recomendable hablar antes con el especialista para buscar una alternativa o una solución. La solución puede ser el uso de una anestesia o realizar la prueba (si es posible) en el aparato que se hacen las Resonancias Magnéticas Abiertas (No claustrofóbicas).
Si es cierto que hay casos que no se puede realizar la RMN abierta ya que se necesita una máquina con más potencia para ver, por ejemplo, los órganos internos y se hace uso de la Resonancia Magnética de Alto Campo, que tiene una potencia mayor y es una máquina cerrada. - Por último, los menores de 4 años son sedados para evitar que se muevan.
